La ciudad del mosaico
Se cree que la laberíntica parte moderna de Madaba, situada a unos 30 km al sur de Ammán, fue habitada ya en la Antigüedad, ocupándose el montículo que sobresale sobre las fértiles llanuras del lugar.
Aparece en la Biblia bajo el nombre de Medeba, según Moisés y el Éxodo (Num. 21:30; Josué 13:9). Madaba era una población moabita, cercana a la frontera con Ammón, el cual, siempre que la ciudad era conquistada por los Amoritas o los Israelitas, intentaba, por su parte, anexionarla a sus dominios. Conforma una de las diversas ciudades que se mencionan en la Estela de Mesha, o piedra moabita, donde quedaron grabados los logros de Mesha, Rey de Moab, a mediados del siglo IX a.C. Se habla de la reconquista de Mabada, entre otros, a manos de los Israelíes y su reconstrucción. Seguidamente, Madaba pasó a formar parte del Reino nabateo; a partir del año 106 d.C., se anexionó al dominio romano. Fue una próspera población de la provincia de Araba, decorada con hermosas edificaciones, templos y calles con columnas.